Criaturas rastreras.
Oberón planeaba sobre las inmensas estribaciones de la cordillera occidental, que caen a la gran charca terrícola llamada Océano Pacífico. Su mascullar metafísico se vio interrumpido al enfocar sus cámaras de video sobre una murga de bípedos en campal batalla. Eran los cielos tropicales de un candente Toboso, que mantenían a Obe espectador de tan …